La educación es un pilar importante en la nueva sociedad, al igual que en la sociedad actual, pero con un enfoque totalmente diferente.

El trabajo participativo es la clave de un aprendizaje que se consolida en las personas.

Los centros educativos, por llamarlos de alguna manera, tendrán entornos que permitan el trabajo tanto de campo como en lugares limitados. Todos ello mantendrá un entorno libre que permita su futura ampliación de las necesidades requeridas por el centro.

Existirá una estrecha vinculación entre el centro educativo, el centro cultural y deportivo de la ciudad.

Sistemas actuales como Waldorf, Montesori combinados correctamente con actividades deportivas generarán en cada participante una motivación y deseo de participación.

Así como se habla de deportes de las misma magnitud estará considerada la música o el arte. Serán actividades directamente ligadas al aprendizaje de acuerdo a la edad de los participantes.

El centro educativo formará seres activos que necesitan desarrollar las capacidades particulares de cada uno de una forma teórica y practica, en combinación con las actividades artísticas, deportivas y/o culturales los alumnos plasman de manera fehaciente su aprendizaje comprendiendo los métodos y formas para su aplicación.

La relaciones entre los estudiantes, educadores y padres se considerará una parte esencial para su educación y desarrollo emocional.

La motivación por ser un artífice de su propio aprendizaje será otro pilar dentro de los sectores educativos, en busca de personas autonómicas que pueden trabajar en conjunto en busca de un objetivo común.